El incienso es más que una rica fragancia, es mucho más que el simple hecho de conseguir que nuestro entorno huela mejor. Al igual que otras formas de aromaterapia, el incienso bien elegido puede desestresar, vigorizar o relajar tanto cuerpo como la mente.
Tal vez el más poderoso elemento del incienso sea su capacidad para llevarnos a estados meditativos desde los que podemos reunir la claridad, la fuerza y la motivación necesaria para proseguir con nuestra vida diaria.
Nos proporciona una herramienta con la que poder profundizar más en nuestro interior para comprendernos a nosotros mismos y lograr una mayor consciencia del mundo que nos rodea.
A medida que experimentes y explores las fragancias de incienso, descubrirás que cualquier actividad puede realzarse “escuchando al incienso” según describe los chinos y los japoneses el quemar inciensos.