Descripción del Producto
El auténtico incienso ayurvédico ha sido hecho a mano en India a base de la mejor selección de flores, hierbas y plantas. Es medicinal y tiene propiedades curativas y de sanación. Además, promueve una salud vibrante, armonía interna y equilibrio personal. Cura los disturbios de la mente, alivia tensiones y purifica la atmósfera, erradicando las influencias negativas.
El incienso ayurvédico es algo más que un aroma agradable: es medicinal con propiedades curativas y de sanación.
Todos los cincos sentidos son importantes para crear equilibrio. El olfato tiene una influencia primordial. La nariz es la entrada al cerebro y cada aroma que inhalamos ejerce un influencia directa sobre la mente y las emociones. La nariz es también la entrada a la conciencia. Aromas y olores tienen una capacidad única para evocar impresiones vividas y sabores emocionales. El uso de los aromas para activar o relajar la mente data desde la antigüedad expendiéndose por civilizaciones y continentes.
Los aromas naturales de acuerdo a los principios del Ayurveda no solamente dan un instantáneo placer sensual, sino que también iluminan la mente y equilibran las energías sutiles del cuerpo.
El incienso ayurvédico utiliza seleccionados aromas por sus conocidos efectos sobre cada dosha, para traer el estado de armonía, de acuerdo a las necesidades individuales.
El quemar el incienso ayurvédico es una manera simple en la que podemos tomar nuestros asuntos en nuestras propias manos para crear positividad y sobre todo un sentido de bienestar en nuestra vida diaria.
Tradicionalmente este incienso es utilizado para adorar a Krishna en los templos a través de India. Un elevado standard se mantiene hasta hoy usando solamente los artículos mas puros. Este incienso puede ser utilizado medicinalmente por naturópatas y por gente que practica el Ayurveda. Puede utilizarse para relajar pacientes durante tratamientos de acupuntura y en todo tipo de masajes. Es perfecto para aromaterapia.
Es una adición maravillosa para las clases de yoga y meditación, ya que crea una atmósfera espiritual libre de vibraciones negativas.
Ayurveda es la ciencia de la medicina impartida por Sri Dhanvantari, encarnación de Krishna, y es el método más antiguo en la historia de la medicina para el cuidado de la salud y la sanación. Ayurveda significa conocimiento de la vida o longevidad. Provee la llave para la salud y sanación, basado sobre la premisa de que, la mente y el cuerpo están unidos en el nivel de la conciencia. En otras palabras, Ayurveda toma en consideración la conexión intrínsica entre la mente, el cuerpo y el alma; viendo en esta relación, al ser humano completo. La salud no es meramente considerada como ser un estado de libertad de dolencias o enfermedades sino un estado de disfrute ininterrumpido, tanto física como mentalmente, con satisfacción y de felicidad espiritual.
Definiendo y determinando la dosha
Todo en la creación, incluidos nosotros, está compuesto de cinco elementos; espacio o éter, aire, fuego, agua y tierra. Cada uno de nosotros tiene estos elementos en proporciones diferentes, por las cuales las características básicas son determinadas. Ayurveda clasifica a cada uno de acuerdo a su naturaleza universal o dosha, dependiendo de qué características son predominantes. Esto determina sobre todo la apariencia, disposición emocional y sus aptitudes mentales en general. Todas las enfermedades resultan de un desequilibrio de las doshas, resultantes de factores físicos, mentales, o de comportamiento y entorno. Cuando nuestra configuración de elementos se vuelve desequilibrada, la enfermedad aparece. El resultado de restaurar el equilibrio de los elementos son la salud vibrante y el bienestar.
El cuerpo humano está compuesto por tres elementos fundamentales o doshas:
1 – Vata. Aire y agua, es el originador de todos los movimientos del cuerpo.
2 – Pitta. Fuego y agua, gobierna principalmente hormonas y enzimas, también es responsable de la digestión, pigmentación, temperatura del cuerpo, del hambre, la sed, la vision, el vigor, etc.
3 – Kapha. Tierra y agua, regula las otras dos, responsable de la conexión de la unión de los huesos, la naturaleza sólida del cuerpo y su mantenimiento, del poder
sexual, la fortaleza y la paciencia.
Cada uno de nosotros tiene una de esas tres doshas más predominante que las otras dos. Cuando esté bajo la influencia del estrés, un elemento predominante, ya sea aire, fuego o tierra, tenderá a desequilibrarse.